Elena G. de White utiliza la expresión “la luz mejor” para referirse a la verdad creciente y progresiva que Dios revela a la humanidad. En sus escritos, la luz es una metáfora de la verdad, el conocimiento del amor de Dios y la influencia positiva de los cristianos en el mundo. Esta luz no es estática, sino que aumenta y se expande, iluminando cada vez más intensamente a medida que los creyentes colaboran con Dios y comparten Su mensaje.
Algunas ideas clave de sus escritos sobre este tema incluyen:
1. La luz de la verdad debe brillar hasta los confines de la tierra, y Dios concede una luz cada vez mayor a sus representantes para que la difundan en un mundo oscuro (
8T 40.1).
2. Cuando Dios envía ayuda o nueva luz, su pueblo debe valorarla y aprovechar cada oportunidad para compartir el mensaje de advertencia y esperanza (
HS 200.4).
3. La luz es una bendición universal, destinada a todos sin distinción, y representa el conocimiento del amor de Dios que debe iluminar a toda la humanidad (
PK 719.3;
COL 418.3).
4. Aunque a veces la luz parece pequeña o débil, a través de la obra de los creyentes, el mundo entero puede llegar a ser iluminado (
LS 295.1).
5. Así como una lámpara guía a los barcos en la oscuridad, los seguidores de Cristo deben brillar para guiar a otros hacia Él y hacia el hogar celestial (
SJ 62.7).
En resumen, “la luz mejor” es la revelación progresiva de la verdad divina, que debe ser recibida, valorada y compartida para iluminar a todos los que la buscan.
Referencias académicas:
- White, E. G. (1904). Testimonios para la Iglesia, tomo 8, p. 40.1.
- White, E. G. (1890). Historical Sketches, p. 200.4.
- White, E. G. (1917). Profetas y Reyes, p. 719.3; White, E. G. (1900). Palabras de Vida del Gran Maestro, p. 418.3.
- White, E. G. (1915). La Historia de la Vida de Elena G. de White, p. 295.1.
- White, E. G. (1896). El Deseado de Todas las Gentes (también conocido como El Camino a Cristo para niños), p. 62.7.