La cita que mencionas se encuentra en el libro "Testimonios para la Iglesia", tomo 5, página 166.3. Ellen G. White escribe: "Hay muchos que hablan superficialmente de la verdad bíblica, cuyas almas están tan desprovistas del Espíritu de Dios como los montes de Gilboa de rocío y de lluvia. Pero lo que necesitamos es hombres que estén completamente convertidos y que puedan enseñar a otros cómo entregar su corazón a Dios. El poder de la piedad casi ha dejado de estar en nuestras iglesias. ¿Y por qué es esto? El Señor todavía espera para ser misericordioso; no ha cerrado las ventanas del cielo. Nosotros nos hemos separado de Él. Necesitamos fijar el ojo de la fe en la cruz y creer que Jesús es nuestra fortaleza, nuestra salvación." En esta cita, Ellen G. White utiliza la imagen de los montes de Gilboa (que en la Biblia quedaron sin rocío ni lluvia como símbolo de maldición y esterilidad) para ilustrar la condición espiritual de quienes predican poco de Cristo y carecen del Espíritu de Dios. Referencia académica: White, E. G. (1885). Testimonios para la Iglesia, tomo 5, p. 166.3. Mountain View, CA: Pacific Press Publishing Association.