La salud mental, según los escritos de Ellen G. White, está íntimamente relacionada con la salud física y espiritual. Aquí algunos puntos clave extraídos de sus libros:
- La mente y el cuerpo están conectados: "La relación que existe entre la mente y el cuerpo es muy íntima. Cuando uno es afectado, el otro simpatiza. La condición de la mente afecta la salud en un grado mucho mayor de lo que muchos se dan cuenta." (El Ministerio de Curación, p. 241)
- Muchas enfermedades físicas tienen su origen en problemas mentales como la depresión, la ansiedad, el remordimiento, la culpa y la desconfianza.
- El poder mental puede influir en la recuperación física: "En el tratamiento de los enfermos no debe pasarse por alto el efecto de la influencia mental. Bien utilizada, esta influencia es uno de los agentes más eficaces para combatir la enfermedad." (El Ministerio de Curación, p. 241.4)
- El bienestar mental se favorece con hábitos de vida saludables, ejercicio, temperancia y una vida activa.
- El estado mental positivo, como la alegría, el agradecimiento y el altruismo, tiene un efecto vitalizador sobre todo el organismo.
- "Una persona cuya mente está tranquila y satisfecha en Dios está en el camino hacia la salud." (La Temperancia, p. 235.3)
En resumen, la salud mental es el estado en que la mente está equilibrada, libre de cargas negativas, y en armonía con el cuerpo y el espíritu, lo que contribuye a la salud integral del ser humano.
Referencias:
- White, E. G. (1905). El Ministerio de Curación (Ministry of Healing), pp. 241, 241.4.
- White, E. G. (1890). La Temperancia (Healthful Living), p. 235.3.