Sí, según los escritos de Elena G. de White, es verdad que Nadab y Abiú estaban bajo los efectos del vino cuando cometieron su pecado. Ella afirma claramente que: - "Nadab y Abiú, por beber vino, nublaron sus facultades de razonamiento, y así perdieron su sentido de las cosas sagradas, pensando que podían ofrecer fuego común en vez de sagrado. Dios no los excusó porque su cerebro estaba confundido. Fuego de su presencia los destruyó en su pecado." (4aSG 125.1) - "Nadab y Abiú nunca habrían cometido ese pecado fatal si no se hubieran intoxicado parcialmente por el uso libre del vino... Sus mentes se confundieron y sus percepciones morales se embotaron, de modo que no pudieron discernir la diferencia entre lo sagrado y lo común." (PP 361.3) - "Tenían el hábito de beber vino, y entraron en el servicio sagrado en el santuario con mentes confundidas." (SpTEd 35.2) Por lo tanto, Elena G. de White enseña que el uso de vino y la intoxicación fue un factor directo en el pecado y la muerte de Nadab y Abiú. Referencias: - White, E. G. (1882). Spiritual Gifts, vol. 4a, p. 125.1. - White, E. G. (1890). Patriarcas y Profetas, p. 361.3. - White, E. G. (1897). Special Testimonies on Education, p. 35.2.