Ellen G. White enfatiza claramente que el colportor debe ir con un espíritu misionero y no con la intención principal de ganar dinero. Ella señala que, aunque es justo que el colportor reciba una remuneración adecuada por su trabajo, el énfasis debe estar en el deseo de llevar la verdad a otros y en considerar la labor como un privilegio y una misión. No debe verse simplemente como un medio de ganancia personal.
Algunos extractos relevantes de sus escritos incluyen:
- “Nuestros hermanos deben mostrar discreción al seleccionar a los canvassers y colportores, a menos que hayan decidido que la verdad sea malinterpretada y mal representada. Deben dar a todos los verdaderos obreros un buen salario; pero la suma no debe aumentarse para comprar canvassers, porque este curso los perjudica. Los hace egoístas y derrochadores. Procure impresionarles con el espíritu de la verdadera obra misionera y con las cualificaciones necesarias para asegurar el éxito. El amor de Jesús en el alma llevará al canvasser a sentir que es un privilegio trabajar para difundir la luz.” (GW92 348.3,
MC 56.3)
- “El trabajo del colportor es elevado y será un éxito si es honesto, diligente y paciente, persiguiendo constantemente la obra que ha emprendido. Su corazón debe estar en la obra... El trabajador puede estar continuamente formando un carácter simétrico. Grandes caracteres se forman por pequeños actos y esfuerzos.” (
4T 603.2)
- “El eficiente colportor, así como el ministro, debe tener una remuneración suficiente por sus servicios si su trabajo es fielmente realizado.” (GW92 341,
4T 389.3)
- “Procure impresionarles con el espíritu de verdadera obra misionera... El amor de Jesús en el alma llevará al canvasser a sentir que es un privilegio laborar para difundir la luz.” (GW92 348.3)
En resumen, el colportor debe ver su labor principalmente como una misión y un privilegio, no como un simple medio de ganancia económica.
Referencias:
- White, E. G. (1892). Gospel Workers (GW92), pp. 341, 348.3.
- White, E. G. (1948). The Colporteur Evangelist (MC), p. 56.3.
- White, E. G. (1881). Testimonies for the Church, Vol. 4 (4T), pp. 389.3, 603.2.