El sueño de Jacob con la escalera y los ángeles, según los escritos de Elena G. de White, tiene un profundo significado espiritual:
Jacob, después de huir por su pecado de engañar a su hermano Esaú, se sentía solo, culpable y temía estar separado de Dios. En ese estado, tuvo un sueño en el que vio una escalera que iba de la tierra al cielo, y ángeles subían y bajaban por ella. Dios mismo estaba en la cima de la escalera y le habló palabras de consuelo y promesa (ver El Camino a Cristo, 19.2; Patriarcas y Profetas, 183.4).
El significado principal de la escalera es que representa a Jesús, el único medio de comunicación entre Dios y la humanidad. La escalera muestra que, a pesar del pecado, hay un camino abierto para que los seres humanos se reconcilien con Dios. Los ángeles que suben y bajan simbolizan la constante comunicación y ministerio de los ángeles entre el cielo y la tierra (ver El Camino a Cristo, 19.2; Consejos para la Iglesia, 155.2; El Conflicto de los Siglos, 157.1).
El sueño fue una respuesta a la necesidad de Jacob de saber que no estaba abandonado por Dios y que había esperanza y perdón para él. También es una lección para todos los que se sienten lejos de Dios: hay un camino de regreso, y ese camino es Cristo (ver El Camino a Cristo, 19.2; Patriarcas y Profetas, 183.4).
En resumen, el sueño de la escalera y los ángeles significa que Jesús es el puente entre el cielo y la tierra, y que siempre hay comunicación y ayuda divina disponible para los que buscan a Dios, aun en medio de la culpa y la soledad.
Referencias:
- White, E. G. (1892). El Camino a Cristo (SC), p. 19.2.
- White, E. G. (1890). Patriarcas y Profetas (PP), p. 183.4.
- White, E. G. (1946). Consejos para la Iglesia (CE), p. 155.2.
- White, E. G. (1911). El Conflicto de los Siglos (HS), p. 157.1.