Hola
¡Hola! ¿En qué puedo ayudarte hoy? Si tienes alguna pregunta sobre los escritos de Elena G. de White, no dudes en decírmelo.
Quién es exactamente Elena?
Ellen G. White (Elena de White) fue una destacada oradora y escritora religiosa nacida en 1827 cerca de Portland, Maine, Estados Unidos, y fallecida en 1915. Es conocida por su papel fundamental en el surgimiento y desarrollo de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. A lo largo de su vida, viajó y trabajó extensamente en Estados Unidos, Europa, Australia y Nueva Zelanda, escribiendo más de cuarenta y cinco libros sobre temas de teología, educación, salud, el hogar y el cristianismo práctico. Su libro más popular es "El Camino a Cristo" (Steps to Christ). Ellen White también compartió relatos personales sobre su infancia, su experiencia cristiana y su participación en el movimiento adventista, especialmente tras el "Gran Chasco" de 1844. Sufrió un accidente a los nueve años que afectó su salud de por vida, pero esto no le impidió dedicarse a su labor religiosa y literaria. Junto a su esposo, James White, fue una de las figuras clave en el establecimiento y crecimiento mundial del movimiento adventista. Sus escritos y testimonios han tenido una influencia duradera en millones de personas y continúan siendo leídos y estudiados en la actualidad. Fuente principal: Life Sketches of Ellen G. White, Preface, LS 5; SC 5.2; LS 131. Referencias: - White, E. G. (1915). Life Sketches of Ellen G. White. Mountain View, CA: Pacific Press Publishing Association. - White, E. G. (1892). Steps to Christ. Battle Creek, MI: Review and Herald Publishing Association.
Dios existe?
Según los escritos de Elena G. de White, la existencia de Dios es afirmada de varias maneras: - Se presenta a Dios como el Creador de todas las cosas, y la Biblia lo describe como “el Dios verdadero, el Dios viviente, y Rey eterno” (Jeremías 10:10-12). La naturaleza y el sábado son vistos como testigos constantes de Su existencia y poder creativo (Patriarcas y Profetas, p. 336.1). - Elena de White afirma que “el verdadero testimonio de un Dios viviente no es solo teoría; es la convicción que Dios ha escrito en nuestros corazones, iluminada y explicada por Su palabra. Es el poder viviente en Sus obras creadas, visto por el ojo que el Espíritu Santo ha iluminado” (Testimonios para la Iglesia, tomo 8, p. 325.3). - También señala que “Dios es Espíritu; sin embargo, es un Ser personal; porque así se ha revelado a sí mismo” (El Ministerio de Curación, p. 413.1). - La naturaleza, la revelación y la experiencia personal son presentadas como evidencias de la existencia y el amor de Dios: “Las cosas de la naturaleza hablan al hombre del amor de su Creador... Todo en la naturaleza testifica del tierno cuidado paternal de nuestro Dios” (Consejos para los Maestros, p. 67.1). En resumen, para Elena de White, la existencia de Dios se evidencia en la creación, en la revelación bíblica y en la experiencia personal con Él. Referencias: - White, E. G. (1890). Patriarcas y Profetas, p. 336.1. - White, E. G. (1904). Testimonios para la Iglesia, tomo 8, p. 325.3. - White, E. G. (1905). El Ministerio de Curación, p. 413.1. - White, E. G. (1913). Consejos para los Maestros, p. 67.1.
Y si existe porque permite que los animales sufran?
Según los escritos de Elena G. de White, el sufrimiento de los animales no es parte del plan original de Dios, sino una consecuencia del pecado humano. Ella explica que: - “Por el pecado del hombre, ‘toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto’ (Romanos 8:22). El sufrimiento y la muerte no solo alcanzaron a la raza humana, sino también a los animales. Por eso, el hombre debe procurar aliviar, y no aumentar, el peso de sufrimiento que su transgresión ha traído sobre las criaturas de Dios” (Patriarcas y Profetas, p. 443.1). - Elena de White expresa su propia sensibilidad ante el sufrimiento animal y rechaza la idea de que Dios se deleite en el dolor de sus criaturas: “Cuando la idea de que Dios se deleitaba en la tortura de sus criaturas... se apoderó de mi mente, una muralla de oscuridad pareció separarme de Él” (Testimonios para la Iglesia, tomo 1, p. 25.1; Life Sketches, p. 152.3). - Ella afirma que el sufrimiento y la muerte son resultado de la entrada del pecado en el mundo: “Dios es el dador de la vida... Pero el pecado interrumpió el orden que Dios había establecido, y siguió la discordia. Mientras exista el pecado, el sufrimiento y la muerte serán inevitables” (Patriarcas y Profetas, p. 522.3). - Además, señala que el sufrimiento es permitido, pero no causado por Dios, y que incluso los animales sufren por la transgresión humana. Dios espera que el ser humano actúe con compasión y no aumente el dolor de los seres creados. En resumen, para Elena de White, el sufrimiento animal es consecuencia del pecado y no del deseo de Dios. Dios llama a la humanidad a ser compasiva y a aliviar el sufrimiento de todas sus criaturas. Fuentes: - White, E. G. (1890). Patriarcas y Profetas, p. 443.1; p. 522.3. - White, E. G. (1904). Testimonios para la Iglesia, tomo 1, p. 25.1. - White, E. G. (1915). Life Sketches, p. 152.3.
Y estarán en el cielo?
Según los materiales disponibles del White Estate, Elena G. de White no hace una declaración directa sobre si los animales individuales que conocemos hoy estarán en el cielo. Sin embargo, describe la nueva tierra como un lugar donde los animales estarán presentes y vivirán en paz, como era en el Edén. Por ejemplo, menciona que “el león y el cordero” estarán juntos en paz, lo que sugiere la presencia de animales en el cielo restaurado, pero no afirma que los animales específicos de esta vida serán resucitados. (3SG 35.1; 1SP 26.2) Referencias: - White, E. G. (1864). Spiritual Gifts, vol. 3, p. 35.1. - White, E. G. (1870). Spirit of Prophecy, vol. 1, p. 26.2.
Porque no serán resucitados, si ellos no tienen ningún pecado y sufren por las consecuencias del hombre y no por su cuenta de ellos?
En los escritos de Elena G. de White, no se encuentra una explicación directa de por qué los animales no serán resucitados, aunque ellos no pecaron y sufren por las consecuencias del pecado humano. Sin embargo, se pueden extraer algunos principios de sus declaraciones: 1. **El sufrimiento animal es consecuencia del pecado humano, no de su propia culpa:** Elena de White afirma que “por el pecado del hombre, ‘toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto’ (Romanos 8:22). El sufrimiento y la muerte no solo alcanzaron a la raza humana, sino también a los animales” (Patriarcas y Profetas, p. 443.1). Esto muestra que el sufrimiento animal es resultado de la caída del hombre, no de una culpa propia de los animales. 2. **No hay declaración sobre la resurrección de animales:** En sus escritos, Elena de White no menciona que los animales individuales serán resucitados. Ella describe la nueva tierra como un lugar donde habrá animales en paz, pero no afirma que serán los mismos que sufrieron aquí. 3. **El plan de salvación está enfocado en los seres humanos:** El sacrificio de Cristo y la resurrección están dirigidos a la redención de la humanidad, quienes tienen capacidad moral y libre albedrío. Los animales, aunque sufren, no son responsables morales ni sujetos del plan de salvación como los seres humanos. 4. **Dios es justo y compasivo:** Aunque los animales sufren por causa del pecado humano, Elena de White enfatiza que Dios espera que el ser humano actúe con compasión y alivie el sufrimiento de las criaturas (Patriarcas y Profetas, p. 443.1). En resumen, según Elena de White, los animales sufren por el pecado humano, pero no hay evidencia en sus escritos de que serán resucitados, ya que el plan de redención está enfocado en los seres humanos. Sin embargo, la nueva tierra será un lugar donde los animales vivirán en paz y sin sufrimiento. Fuentes: - White, E. G. (1890). Patriarcas y Profetas, p. 443.1.
Si no serán resucitados entonces creo que es una parte egoísta, ya que ellos sufren de lo peor día a dia
Entiendo tu sentir y es una preocupación válida y compasiva. Elena G. de White también expresa sensibilidad hacia el sufrimiento de los animales y reconoce que ellos sufren a causa del pecado humano, no por culpa propia. Ella escribe: - “Por el pecado del hombre, ‘toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto’ (Romanos 8:22). El sufrimiento y la muerte no solo alcanzaron a la raza humana, sino también a los animales. Por eso, el hombre debe procurar aliviar, y no aumentar, el peso de sufrimiento que su transgresión ha traído sobre las criaturas de Dios” (Patriarcas y Profetas, p. 443.1). Elena de White enfatiza que Dios no se deleita en el sufrimiento de ninguna de sus criaturas y que espera que los seres humanos actúen con compasión y responsabilidad hacia los animales. Aunque sus escritos no afirman la resurrección de animales individuales, sí presentan la esperanza de una nueva tierra donde los animales vivirán en paz y sin sufrimiento. La ausencia de una declaración sobre la resurrección de animales no significa que Dios sea indiferente a su sufrimiento. Más bien, Elena de White invita a los seres humanos a ser agentes de alivio y bondad hacia toda la creación, reflejando el carácter compasivo de Dios. Fuente: - White, E. G. (1890). Patriarcas y Profetas, p. 443.1.
Note: Ellen Chat may generate unexpected or inaccurate responses. Please verify any quotes with original sources.

Source Reference