Según los escritos de Elena G. de White, Satanás y sus ángeles tuvieron la oportunidad de arrepentirse, pero la rechazaron. Después de ser expulsado del cielo, Satanás expresó arrepentimiento, pero ya era demasiado tarde porque el pecado se había arraigado en su naturaleza.
Aquí hay algunos pasajes que describen estos eventos:
* **Antes de la expulsión, hubo una oportunidad:** Mientras aún estaba en el cielo, hubo un punto en el que los seguidores de Satanás consideraron arrepentirse. Sin embargo, Satanás los convenció de que habían ido demasiado lejos: "Muchos de los que simpatizaban con Satanás estaban inclinados a seguir el consejo de los ángeles leales, arrepentirse de su descontento y ser recibidos nuevamente en la confianza del Padre y su amado Hijo. El poderoso rebelde declaró entonces que conocía la ley de Dios, y que si se sometía a una obediencia servil, se le quitaría su honor... Les dijo que tanto él como ellos ya habían ido demasiado lejos para volver, y que afrontaría las consecuencias; porque nunca se inclinaría en adoración servil al Hijo de Dios; que Dios no perdonaría, y que ahora debían afirmar su libertad y ganar por la fuerza la posición y la autoridad que no se les concedió voluntariamente" (
1SP 20.2).
* **Después de la expulsión, expresó arrepentimiento:** Una vez que fue expulsado y se dio cuenta de lo que había perdido, Satanás lamentó su decisión y buscó una entrevista con Cristo para pedir ser readmitido. "Satanás tembló al ver su obra. Estaba solo meditando sobre el pasado, el presente y sus planes futuros... llamó a un ángel que pasaba y le suplicó una entrevista con Cristo. Esto le fue concedido. Entonces le relató al Hijo de Dios que se arrepentía de su rebelión y deseaba de nuevo el favor de Dios... Cristo lloró por la aflicción de Satanás, pero le dijo, como la mente de Dios, que nunca podría ser recibido en el Cielo. El Cielo no debe ser puesto en peligro. Todo el Cielo se estropearía si él fuera recibido de nuevo; porque el pecado y la rebelión se originaron con él. Las semillas de la rebelión todavía estaban dentro de él" (
1SP 29.2).
* **La razón por la que su arrepentimiento no fue aceptado:** Su arrepentimiento no fue aceptado porque el pecado se había convertido en parte de su ser, y su regreso habría puesto en peligro la paz del cielo. "Después de que Satanás y los que cayeron con él fueron excluidos del cielo, y se dio cuenta de que había perdido para siempre toda su pureza y gloria, se arrepintió y deseó ser reinstalado en el cielo... Pero no; el cielo no debe ser puesto en peligro. Todo el cielo podría ser dañado si él fuera llevado de vuelta; porque el pecado se originó con él, y las semillas de la rebelión estaban dentro de él... su pecado —su odio, su envidia y sus celos— había sido tan grande que Dios no podía borrarlo. Debía permanecer para recibir su castigo final" (
EW 146.1).
En resumen, la oportunidad de Satanás para arrepentirse terminó cuando su rebelión se consolidó y fue expulsado del cielo. Su posterior "arrepentimiento" fue un lamento por sus pérdidas, no un verdadero cambio de corazón, ya que "las semillas de la rebelión" permanecían en él.