Según los escritos de Ellen G. White, el mayor peligro del hombre es el autoengaño y la autosuficiencia, que lo llevan a separarse de Dios. Ella lo declara de la siguiente manera: "El gran peligro del hombre consiste en engañarse a sí mismo, en entregarse a la autosuficiencia y separarse así de Dios, fuente de su fortaleza" (MH 455, 8T 315). Además, identifica otros peligros graves que se derivan de esta misma raíz: * **El amor al mundo:** "El peligro del pueblo de Dios en los últimos años ha sido el amor al mundo. De éste han brotado los pecados del egoísmo y la codicia" (1T 141.2). * **El orgullo y la confianza en uno mismo:** "Uno de vuestros mayores peligros es el espíritu de confianza propia y de orgullo" (4T 259.1). * **La prosperidad:** "Pero es la prosperidad lo que resulta más peligroso para la vida espiritual" (MH 211.3). En esencia, el peligro fundamental es cualquier cosa que haga que una persona confíe en sí misma, en sus posesiones o en el mundo, en lugar de depender completamente de Dios.