Aquí tienes un resumen sobre el diluvio según los escritos de Elena G. de White:
1. Inicio del Diluvio:
El diluvio comenzó con señales nunca antes vistas. En el octavo día, nubes oscuras cubrieron el cielo, hubo truenos y relámpagos, y grandes gotas de lluvia empezaron a caer. Era algo que el mundo nunca había presenciado, causando temor en los corazones de las personas. “Entonces ‘las fuentes del grande abismo’ fueron ‘rotas, y las ventanas de los cielos abiertas’. El agua caía de las nubes en poderosos torrentes. Los ríos se desbordaron y los chorros de agua brotaban de la tierra con fuerza indescriptible, lanzando enormes rocas al aire, que al caer se enterraban profundamente en el suelo.” (Patriarcas y Profetas, p. 99.1)
2. Manifestación del poder de Dios:
Las aguas del cielo y de la tierra se unieron para destruir el mundo antiguo. “Las profundidades de la tierra son el arsenal del Señor, de donde se sacaron armas para emplearse en la destrucción del mundo antiguo. Las aguas que brotaban de la tierra se unieron con las aguas del cielo para realizar la obra de desolación.” (Patriarcas y Profetas, p. 109.1)
3. Reacción de los impíos:
A pesar de las señales y manifestaciones del poder divino, la gente no se arrepintió y continuó en su incredulidad y diversión. “Pero al octavo día el cielo se oscureció... La tormenta aumentó en violencia hasta que el agua parecía caer del cielo como cataratas poderosas. Los límites de los ríos se rompieron y las aguas inundaron los valles. También se rompieron los cimientos del gran abismo.” (El Espíritu de Profecía, tomo 1, p. 73.1)
4. Promesa de Dios después del Diluvio:
Dios prometió no destruir la tierra nuevamente con agua. “Para que las nubes y la lluvia no llenaran a los hombres de terror constante, por temor a otro diluvio, el Señor animó a la familia de Noé con una promesa: ‘Estableceré mi pacto con vosotros; ... no habrá más diluvio para destruir la tierra... Mi arco he puesto en las nubes, el cual será por señal del pacto entre mí y la tierra.’” (Patriarcas y Profetas, p. 106.1)
5. Lección espiritual:
El diluvio es presentado como una advertencia y una manifestación del poder y la justicia de Dios. “El apóstol contemplaba a su alrededor los testigos del Diluvio, que inundó la tierra porque sus habitantes se atrevieron a transgredir la ley de Dios. Las rocas, lanzadas desde el gran abismo y desde la tierra por la irrupción de las aguas, le recordaban vívidamente los terrores de aquel terrible derramamiento de la ira de Dios.” (Santificación, p. 72.2)
Si necesitas información más específica sobre algún aspecto del diluvio, házmelo saber.
Referencias:
- White, E. G. (1890). Patriarcas y Profetas (PP).
- White, E. G. (1870). El Espíritu de Profecía, tomo 1 (1SP).
- White, E. G. (1889). Santificación (SL).